Informe de Adrienne Pine.
Yo soy una antropóloga que ha trabajado denunciando el rol que ha tenido los Estados Unidos en el golpe de estado militar que vivió Honduras el año pasado, así como en las políticas que allí se han implementado desde aquel entonces. Estos son algunos de los artículos que he escrito a lo largo de este año:
· La falta de democracia y el golpismo en Washington
· WOLA versus la democracia hondureña
· Duros, Suaves e Inteligentes
Le escribo esta carta para comunicarle sobre un nuevo y peligroso uso que se le está dando a la Academia en la actualidad, especialmente a la Antropología, con el objetivo de legitimar la ocupación militar norteamericana en los países latinoamericanos. Hacemos referencia a la asociación entre el Comando Sur de los Estados Unidos (SOUTHCOM, por sus siglas en inglés, es el brazo del pentágono en América Latina y el encargado de todas las bases norteamericanas en la región) y la Universidad Internacional de la Florida (FIU, por sus siglas en inglés). [Aclaración de Atilio Boron: la FIU es una de las principales universidades a la cual acuden algunos académicos “progres” de América Latina para recabar información “objetiva” sobre la situación de Cuba y luego escribir sus “rigurosos” análisis sobre la situación de la isla]
Tal como sucedió el siglo pasado, la industria militar norteamericana continúa encontrando mecanismos para usar la academia y los conceptos antropológicos para encubrir sus acciones bélicas que están al servicio de las corporaciones norteamericanas. En América Latina desde 1963 a 1965, el Proyecto Camelot dejó un oscuro precedente sobre el uso de las ciencias sociales en la legitimación de operaciones de contrainsurgencia (que incluían operaciones psicológicas). Ahora, el Comando Sur y la FIU se han aliado para llevar a cabo la Iniciativa denominada “Cultura Estratégica”, a través del Centro de Investigación Aplicada de la FIU, para lo cual han venido desarrollando una serie de talleres sobre la “Cultura Estratégica” de diferentes países latinoamericanos, cuyos reportes presentamos a continuación:
Argentina; Bolivia; Brazil; Chile; Colombia; Cuba; Ecuador; El Salvador; Guatemala; Haiti; Nicaragua; Peru; y Venezuela
En su sitio web, se define a la “Cultura Estratégica” como “la combinación de experiencias y factores internos y externos – geográficos, históricos, culturales, económicos, políticos y militares – que forman e influyen en la manera en que un país entiende su relación con el resto del mundo, y en la manera en que un estado se va a comportar en la comunidad internacional”. Sin embargo, al observar los documentos producidos por la alianza FIU-SOUTHCOM es evidente que una definición más precisa de la “Cultura estratégica” sería: “propaganda estratégica para la creación de una política ideológica hegemónica favorable para los intereses militares y económicos norteamericanos”.
Es importante comprender que el uso del término “cultura” juega un papel clave en la medida en que éste es central para la antropología. Al usar este concepto, la alianza FIU-SOUTHCOM pretende utilizar la legitimidad e integridad de la antropología y otras ciencias sociales para despolitizar y reafirmar la política de ocupación sobre las Américas.
FIU-SOUTHCOM manifiestan que su alianza tiene por objetivo el realizar una “investigación de la más alta calidad, y generar un conocimiento que pueda ser explicativo en la comprensión de las dimensiones políticas, estratégicas, y socioculturales del comportamiento de un Estado”. Sin embargo, al tomar como ejemplo el caso del taller realizado sobre la “Cultura Estratégica” de Honduras, queda claro que el “alto nivel de investigación” es mucho menos importante que la creación de una “propaganda antidemocrática de alto nivel” que pueda justificar el apoyo al gobierno golpista que allí se ha instalado y aumentar la presencia militar y económica de los Estados Unidos.
El 7 de octubre, se dio a lugar el Taller denominado La Cultura Estratégica de Honduras que contó con la participación de:
o El Doctor José René Argueta, quien sostuvo estar afiliado a la Universidad de Pittsburgh, lo cual es FALSO. Argueta obtuvo un doctorado en esta universidad en el año 2007 en ciencias políticas, pero tras realizar una llamada a esta institución se descubrió que actualmente Argueta no tiene ninguna afiliación en la misma. No obstante, él ha estado utilizando esta afiliación fraudulenta para legitimar su presencia en Honduras y en todo el complejo antidemocrático y militar que allí se ha implementado; participando en todo tipo de conferencias, desde El Barómetro de las Américas (evento patrocinado por USAID) hasta los programas de Estudios comparativos de sistemas electorales.
o El Doctor Norman A. Bailey representa al Instituto para el Crecimiento Económico Global y es “Profesor adjunto de economía y arte de gobernar” en el Instituto para Políticos Mundiales (IPW por sus siglas en inglés), una “Escuela de Postgrado En Seguridad Nacional y Relaciones Internacionales”. Bailey es el autor ideológico de obras como La Invasión Iraní en el Hemisferio Occidental a través de Venezuela y en el IPW la “guerra económica” aparece como una de sus áreas de experticia. Bailey tiene mucha experiencia en ataques contra la democracia de los países latinoamericanos (participación directa en las fuerzas armadas, colaboración en asuntos de inteligencia estratégica y planificación de operativos). Además, trabajó como Asistente Especial del Presidente de Asuntos Nacionales de Seguridad y del Director Ejecutivo de los Asuntos Económicos Internacionales en el equipo del Consejo Nacional de Seguridad durante el gobierno de Ronald Reagan. Bailey también tiene años de experiencia de trabajo en el sector petrolero y en el sector de la industria bancaria y recientemente trabajó como jefe de la misión para Cuba y Venezuela, bajo el mando directo del Director Nacional de Inteligencia John Negroponte. Lea más al respecto aquí. En este taller Bailey promocionó el libro de Marco Cáceres llamado The Good Coup (“El Buen Golpe”
o El Coronel José Amílcar Hernández Flórez, es un militar hondureño que participó en el golpe de estado que sufrió Honduras el año pasado. Hernández Flores se graduó en la Escuela de las Américas por tres ocasiones, en los siguientes cursos (presentados por nombre, grado, curso, fecha y país de origen):
1. Hernandez Flores Jose A. Tte. Curso de Administración de la Instrucción de Unidades Pequeñas 0-2ª, 21 Julio- 2 Septiembre 1982, Honduras
2. Hernandez Flores Jose Amilcar Tte. Cnel. Curso De Sostenimiento Democrático, 6 Abril- 15 Mayo 1998, Honduras
3. Hernandez Flores Jose Amilcar Tte. Cnel. Curso Básico De Computadoras, 18 Mayo- 2 Junio 1998, Honduras.
o El Doctor Ernesto Gálvez Mejía, “investigador independiente”. Gálvez fue asesor en el gobierno de Ricardo Maduro, y es asesor del actual embajador en Washington que representa al gobierno de facto de Pepe Lobo. En este Taller Gálvez manifestó que las Fuerzas Armadas hondureñas tienen el derecho de atacar y reprimir al movimiento de resistencia, porque sus miembros, según él, son violentos y provocan el desorden público; además, sostuvo que el Estado debe tener el monopolio de la fuerza para proteger a los ciudadanos de “extremistas” (haciendo referencia a las personas que han luchado contra el golpe de Estado), a quiénes los definió como criminales.
o Guillermo Peña Panting, del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (COHEP). COHEP fue uno de las principales promotores del golpe de estado en Honduras, así como uno de sus mayores financiadores.
o Marifeli Pérez-Stable Vicepresidenta para la Gobernanza Democrática del Diálogo Interamericano (Un think thank “liberal” de Washington que ha jugado un rol fundamental en la legitimación del golpe de Honduras en los Estados Unidos). Es socióloga y profesora en la FIU.
o Brian Fonseca, de la Universidad Internacional de Florida, ex marine norteamericano y graduado del Centro para Estudios Hemisféricos de Defensa de la Universidad Nacional de Defensa, en el programa “Seguridad transnacional avanzada, estabilidad y democracia”. Como señala la página de información (Sobre Nosotros) del FIU-SOUTHCOM, Fonseca supervisa el programa de “Cultura Estratégica” en el Centro de Investigación aplicada de la Universidad Internacional de Florida.
o Moisés Caballero, es cofacilitador de Fonseca, es también un ex marine y ha dado clases sobre “Principios Bancarios” en la Volunteer State Community College como profesor adjunto. En el sitio web del FIU-SOUTHCOM consta como un “analista”, además estaría finalizando su maestría en estudios latinoamericanos y caribeños en la FIU , con un enfoque en Cuba y los estudios cubano americanos.
o El doctor Rodolfo Pastor Fasquelle es el único intelectual reconocido de este grupo. Pastor Fasquelle es un conocido y respetado historiador que ha dictado cursos en Harvard y en El Colegio de México, y ha sido Ministro de Arte y Cultura por dos ocasiones, la última vez durante el gobierno de Zelaya.
El Doctor Pastor Fasquelle, quien no había escuchado nada de FIU, fue engañado para que participara en este evento, haciéndole creer que su amiga y compañera socióloga Leticia Salomón participaría en el mismo. Pero ya en el evento, se dio cuenta de que estaba rodeado de personas que de forma directa o indirecta han estado implicados en el asesinato de varios de sus amigos.
Preocupado por lo que vio en este taller y por el hecho de que su presencia estaba siendo utilizada para dar un barniz académico a la política norteamericana de militarización que pesa sobre América Latina, y particularmente sobre Honduras, el Doctor Pastor Fasquelle ha compartido conmigo estos documentos.
El concepto de “Cultura” está siendo utilizado para justificar las acciones violentas militares de los Estados Unidos en todo el hemisferio, también está siendo utilizado para justificar el entrenamiento y financiamiento de las Fuerzas Armadas latinoamericanas en técnicas de tortura, asesinato selectivo de líderes opositores y para realizar golpes de estado.
Si nuestra disciplina está siendo apropiada para legitimar la violencia militar, todos nosotros y nosotras estamos obligados a denunciar estas acciones tanto en la esfera académica como de los movimientos sociales. Sólo a través de estas acciones podremos reclamar la ética propia de la antropología y de las ciencias sociales en general.
Es por la gravedad de los hechos que aquí hemos presentados que le invitamos a usted y sus estudiantes a examinar las biografías de los participantes en los eventos que FIU-SOUTHCOM están organizando para “discutir” asuntos relacionados a su país. Adicionalmente, le invitamos a denunciar cómo la seudo ciencia social de la industria militar norteamericana está amenazando la democracia del país en donde usted reside.
Además, le escribo albergando la esperanza de que podamos unirnos internacionalmente para denunciar estos acontecimientos, así como varios antropólogos lo han hecho en contra de los denominados Sistemas de Terreno Humano, utilizados en la guerra de Afganistán e Irak. Juntos, vamos a ser mucho más efectivos en la lucha contra la militarización que está amenazando la vida de nuestras comunidades.
Aquí sugerimos un modelo de carta que puede ser enviado a las instituciones responsables de lo que hoy denunciamos.
En solidaridad,
Adrienne Pine
Assistant Professor of Anthropology
American University
Washington, DC
http://quotha.net
o El Coronel José Amílcar Hernández Flórez, es un militar hondureño que participó en el golpe de estado que sufrió Honduras el año pasado. Hernández Flores se graduó en la Escuela de las Américas por tres ocasiones, en los siguientes cursos (presentados por nombre, grado, curso, fecha y país de origen):
1. Hernandez Flores Jose A. Tte. Curso de Administración de la Instrucción de Unidades Pequeñas 0-2ª, 21 Julio- 2 Septiembre 1982, Honduras
2. Hernandez Flores Jose Amilcar Tte. Cnel. Curso De Sostenimiento Democrático, 6 Abril- 15 Mayo 1998, Honduras
3. Hernandez Flores Jose Amilcar Tte. Cnel. Curso Básico De Computadoras, 18 Mayo- 2 Junio 1998, Honduras.
o El Doctor Ernesto Gálvez Mejía, “investigador independiente”. Gálvez fue asesor en el gobierno de Ricardo Maduro, y es asesor del actual embajador en Washington que representa al gobierno de facto de Pepe Lobo. En este Taller Gálvez manifestó que las Fuerzas Armadas hondureñas tienen el derecho de atacar y reprimir al movimiento de resistencia, porque sus miembros, según él, son violentos y provocan el desorden público; además, sostuvo que el Estado debe tener el monopolio de la fuerza para proteger a los ciudadanos de “extremistas” (haciendo referencia a las personas que han luchado contra el golpe de Estado), a quiénes los definió como criminales.
o Guillermo Peña Panting, del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (COHEP). COHEP fue uno de las principales promotores del golpe de estado en Honduras, así como uno de sus mayores financiadores.
o Marifeli Pérez-Stable Vicepresidenta para la Gobernanza Democrática del Diálogo Interamericano (Un think thank “liberal” de Washington que ha jugado un rol fundamental en la legitimación del golpe de Honduras en los Estados Unidos). Es socióloga y profesora en la FIU.
o Brian Fonseca, de la Universidad Internacional de Florida, ex marine norteamericano y graduado del Centro para Estudios Hemisféricos de Defensa de la Universidad Nacional de Defensa, en el programa “Seguridad transnacional avanzada, estabilidad y democracia”. Como señala la página de información (Sobre Nosotros) del FIU-SOUTHCOM, Fonseca supervisa el programa de “Cultura Estratégica” en el Centro de Investigación aplicada de la Universidad Internacional de Florida.
o Moisés Caballero, es cofacilitador de Fonseca, es también un ex marine y ha dado clases sobre “Principios Bancarios” en la Volunteer State Community College como profesor adjunto. En el sitio web del FIU-SOUTHCOM consta como un “analista”, además estaría finalizando su maestría en estudios latinoamericanos y caribeños en la FIU , con un enfoque en Cuba y los estudios cubano americanos.
o El doctor Rodolfo Pastor Fasquelle es el único intelectual reconocido de este grupo. Pastor Fasquelle es un conocido y respetado historiador que ha dictado cursos en Harvard y en El Colegio de México, y ha sido Ministro de Arte y Cultura por dos ocasiones, la última vez durante el gobierno de Zelaya.
El Doctor Pastor Fasquelle, quien no había escuchado nada de FIU, fue engañado para que participara en este evento, haciéndole creer que su amiga y compañera socióloga Leticia Salomón participaría en el mismo. Pero ya en el evento, se dio cuenta de que estaba rodeado de personas que de forma directa o indirecta han estado implicados en el asesinato de varios de sus amigos.
Preocupado por lo que vio en este taller y por el hecho de que su presencia estaba siendo utilizada para dar un barniz académico a la política norteamericana de militarización que pesa sobre América Latina, y particularmente sobre Honduras, el Doctor Pastor Fasquelle ha compartido conmigo estos documentos.
El concepto de “Cultura” está siendo utilizado para justificar las acciones violentas militares de los Estados Unidos en todo el hemisferio, también está siendo utilizado para justificar el entrenamiento y financiamiento de las Fuerzas Armadas latinoamericanas en técnicas de tortura, asesinato selectivo de líderes opositores y para realizar golpes de estado.
Si nuestra disciplina está siendo apropiada para legitimar la violencia militar, todos nosotros y nosotras estamos obligados a denunciar estas acciones tanto en la esfera académica como de los movimientos sociales. Sólo a través de estas acciones podremos reclamar la ética propia de la antropología y de las ciencias sociales en general.
Es por la gravedad de los hechos que aquí hemos presentados que le invitamos a usted y sus estudiantes a examinar las biografías de los participantes en los eventos que FIU-SOUTHCOM están organizando para “discutir” asuntos relacionados a su país. Adicionalmente, le invitamos a denunciar cómo la seudo ciencia social de la industria militar norteamericana está amenazando la democracia del país en donde usted reside.
Además, le escribo albergando la esperanza de que podamos unirnos internacionalmente para denunciar estos acontecimientos, así como varios antropólogos lo han hecho en contra de los denominados Sistemas de Terreno Humano, utilizados en la guerra de Afganistán e Irak. Juntos, vamos a ser mucho más efectivos en la lucha contra la militarización que está amenazando la vida de nuestras comunidades.
Aquí sugerimos un modelo de carta que puede ser enviado a las instituciones responsables de lo que hoy denunciamos.
En solidaridad,
Adrienne Pine
Assistant Professor of Anthropology
American University
Washington, DC
http://quotha.net