Por Roberto Quesada.
“Nuestro ejército es el más disciplinado, abnegado y desinteresado en todo el mundo terrestre, porque tiene conciencia de su alto papel histórico”.–Augusto Césas Sandino.
Mientras esto escribo escucho las noticias desde Nicaragua, las elecciones se realizan en paz, lideres políticos y religiosos llaman a respetar los resultados y a mantener la calma. Es probable que cuando usted lea el presente el pueblo de Nicaragua esté celebrando la victoria del Frente Sandinista, porque, aunque el país continúa políticamente polarizado, es una inmensa mayoría del pueblo nicaragüense que ha comprendido que el país les pertenece y no puede continuar como un pastel exclusivo para unas cuantas familias oligarcas.
Aunque las comparaciones son tediosas, a veces son necesarias, se puede aprender de ellas. Mientras Honduras se hunde en la pobreza, misma que genera la incontrolable violencia, Nicaragua avanza con una floreciente economía, tanto así que por ser uno de los países más seguros muchos inversionistas ya se han trasladado allí, incluyendo de Honduras como la confitería Venus de Jorge Cocoy- Abudoj Frixione , y otros más de muchas partes del mundo están buscando a Nicaragua como destino de sus inversiones.
Mientras Honduras (el gobierno, claro) anda enrumbado queriendo comprar energía desde allá, desde lugares remotos, con precios exorbitantes que amenazan con arrebatarle camino a la boca las ultimas tortillas al pueblo hondureño, el presidente Daniel Ortega, hace apenas una semana, dio por inaugurada la planta de energía “Victorias del Alba” con capacidad para generar 30 megavatios, con una inversión de 52 millones de dólares, financiados por Venezuela. La planta eléctrica, ubicada en la comunidad de Puerto Sandino, municipio de Nagarote, provincia de León (noroeste), en el Pacífico de Nicaragua, atenderá la demanda de energía de 200.000 familias de León y Managua, precisó el mandatario sandinista, informó la agencia Efe.
El presidente Ortega aseguró que bajo su Gobierno 156.000 viviendas de todo el país han sido beneficiadas con energía eléctrica y dio las gracias a la “Bendita generación y bendita revolución bolivariana y bendito el Alba, porque indiscutiblemente es lo que nos ha permitido tener una economía en crecimiento en Nicaragua”.
Además, aseguró que la refinería de petróleo “El Supremo Sueño de Bolívar” que construirán en Nicaragua, también financiada por Venezuela, “es una obra grande que lleva su tiempo”, pero que “ya se hace realidad”.
Esa refinería, ubicada en la misma zona donde el Gobierno inauguró la planta eléctrica “Victorias del Alba”, tendrá capacidad para procesar hasta 150.000 barriles diarios, según las autoridades.
Pero eso no es todo, habría que ver la distribución de pupitres y útiles escolares a lo largo y ancho de Nicaragua, la salud para el pueblo, pasear por sus modernas carreteras y ver que las calles de Managua distan muchos de los cráteres tegucigalpenses y tantos logros más directamente para el pueblo nicaragüense. Esto es parecido a lo de Argentina, en donde el pueblo, abrumadoramente, ha decidido por Cristina Fernández y esto a la vez refuerza la alianza latinoamericana.
Tanto se ha transformado Nicaragua que el cardenal Obando y Bravo, en el pasado antisandinista hasta la médula, se ha reivindicado y ha llamado al pueblo a votar por Daniel Ortega y ha dado la bendición de todos los logros del gobierno sandinista en pro del pueblo nicaragüense. Este cardenal ha entendido que su lugar debe de estar, como debió ser siempre, del lado del pueblo y no de bufón de unos cuantos oligarcas.
En una reciente homilía, el cardenal Obando y Bravo elogió al presidente Ortega y su esposa, la primera dama y poeta Rosario Murillo, por los planes de asistencia social que impulsan con la ayuda de Venezuela. “El Señor, que premia hasta un vaso de agua dado por su amor, sabrá recompensar con creces todo lo bueno que ustedes han llevado a cabo”.
Mientras que en Honduras el cardenal anda peleando con el pueblo, boicoteándole viajes a periodistas para que no asistan al Vaticano y lanzándole pescozones a camarógrafos y reporteros, según lo ha denunciado en reiteradas ocasiones Canal 36, Cholusat Sur y Radio Globo y Globotv.
Bueno, pero hoy no quería hablar de política, parece que me emocioné con esta creciente Nicaragua sino de cumpleaños. Sí, hoy es un aniversario más de nuestro querido Diario Tiempo. Ahora, ¿se podrá hablar de Diario TIEMPO sin hablar de política? Imposible, este periódico se ha convertido en el emblemático del pueblo hondureño a raíz de su firme postura con el golpe de Estado del 28 de junio del 2009. TIEMPO se ha anidado en el corazón del pueblo hondureño y puedo confirmarlo con los correos que recibo de diferentes puntos de Honduras: De Gracias a Dios, Atlántida, Roatan, Choluteca, de Colinas Santa Bárbara, de Yoro, de Francisco Morazán, de pueblitos que hasta ahora conozco sus nombres como Palo Pintado, Pespire, El Olvido, en fin, de todo el país me escriben lectores bien felicitándome o sugiriéndome temas para que los aborde.
Además, de muchas partes del mundo me contactan lectores que han encontrado mi referencia en Diario TIEMPO. Todo esto demuestra que Diario Tiempo más que como una empresa debe de verse como un medio que enorgullece al pueblo hondureño.
No quiero mencionar a los colegas en TIEMPO, porque son tantos y buenos, que no quiero correr el riesgo de que me queden fuera, pero como muestra de ambos sexos, recomiendo a Patricia Murillo y Billy Peña.
Muchas publicaciones reproducen mis artículos luego de aparecer en TIEMPO como desacato.info, de Brasil, rebelión.org y Kaosenlared.net de España, El Mercurio de Chile, La Tercera de Sudamérica, Honduras contra el golpe (de Honduras), La Nueva Radio y La Primerisima de Nicaragua y así infinidad de medios, todo esto nos confirma el respeto que se ha ganado Diario TIEMPO tanto dentro como fuera de Honduras por su digna postura en defensa de los derechos humanos, de la libertad de expresión y de respaldar los sueños del pueblo hondureño por tener una patria con justicia social. Feliz cumpleaños a sus propietarios, a la familia Rosenthal, especialmente a su presidente Carlos Rosenthal, al editor estrella German Quintanilla y a todos y todas quienes laboran a TIEMPO completo. Feliz aniversario y que vengan muchos más siempre en busca de una Honduras libre.
