Hace 12 años, la derecha más conservadora de Venezuela, apoyada por algunos altos oficiales del ejército, secuestraron al presidente Hugo Chávez y asumieron el poder, pero el pueblo protagonizó una rebelión, que puso en fuga a los golpistas y logró el 13 de abril el regreso triunfal a Miraflores.
Así lo informó el vicepresidente de la Asamblea Nacional (AN), Darío Vivas, quien señaló que estas actividades se efectuarán hasta el próximo 19 de abril, día en el que se conmemoran los 204 años del primer grito por la Independencia y el primer año de la juramentación del presidente de la República, Nicolás Maduro.
La concentración convocada para este viernes en Puente Llaguno, en el centro de la capital, inicia la jornada de actividades y el presidente Maduro encabezará un acto con las Unidades de Batalla Hugo Chávez (UBCH) de Caracas, Vargas y Miranda.
El sábado 12 de abril, la concentración será nuevamente en Puente Llaguno, “donde compartiremos una reflexión sobre el silencio mediático durante el golpe de Estado contra el comandante Chávez y la presencia del fascismo en la sede de la Embajada de Cuba”.
En honor al pueblo organizado que salió a defender la Revolución Bolivariana hace doce años, se hará una gran movilización el domingo 13 de abril, en las afueras del Palacio de Miraflores (sede de Gobierno), en Caracas, donde el mandatario se dirigirá a los asistentes.
Recordó que el 14 de abril de 2013 “fue una victoria popular que hizo posible que el hijo de Chávez, Nicolás Maduro, esté dirigiendo nuestra República, hecho que también estaremos celebrando, hasta el 19 de abril, cuando fue juramentado”.
A doce años del golpe de Estado
Hace doce años, el 11 de abril del 2002, representantes de los sectores más conservadores de la oligarquía venezolana, apoyados por algunos altos oficiales del ejército, secuestraron al mandatario constitucional de Venezuela y asumieron el poder, en la culminación de una intensa campaña desestabilizadora desatada meses antes.
De inmediato, la derecha encabezó una persecusión contra ministros y dirigentes del gobierno, así como de partidarios del chavismo, mientras el entonces presidente de la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecámaras), Pedro Carmona Estanga, asumía la presidencia.
La derecha, fuertemente afectada en sus intereses económicos por las nuevas leyes que impulsó el gobierno, promovieron el golpe de Estado para recuperar el control de la empresa Petróleos de Venezuela (Pdvsa), nacionalizada por el presidente Hugo Chávez.