Por Juan Almendares.
“Ilse Ivana Velásquez, no son los gases los que nos hacen llorar el corazón; sino el coraje y rebeldía ante tanta impunidad y crimen contra ti, el magisterio nacional y el pueblo hondureño. J.A.”
Conocí cuando fungía como Rector de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras a Ilse Ivana Velásquez y a Zenaida Velásquez, ambas hermanas de Manfredo Velásquez quien fuera desaparecido el 12 de septiembre de 1981 por elementos vinculados a las Fuerzas Armadas de Honduras.
Ambas también fueron fundadoras de COFADEH. Zenaida la primera presidenta de la organización, defensora valiente de los derechos humanos; quien vive actualmente en California.
Era una época en que El Alma Mater defendía junto al pueblo los derechos humanos y nunca invito a las fuerzas militares y policiales a que reprimieran al estudiantado ni a la clase obrera.
Todos los corazones estamos profundamente conmovidos por la forma violenta en que murió Ilse Ivana Velásquez (59 años)expuesta a las bombas lacrimógenas y arrollada por una tanqueta.
Su muerte es un indicador de la violencia extrema contra el magisterio nacional que pretende aniquilar la educación publica al servicio de la patria
Cuando observemos a hombres o mujeres policías o militares con mascaras antigas que aterrorizan a los manifestantes; es que están dispuestos a matar porque los gases no solo producen lagrimeo, sino que pueden ser mortales.
En un artículo publicado en la Revista de la Asociación Medica Americana(The Jourmnal of the American Medical Asosociation) correspondiente al 4 de agosto , 1989, Vol. 262, No 5; titulado: “ Gas Lacrimógeno : Agente Peligroso o Arma Química toxica que fue realizado por los científicos
Howard Hu; Jonathan Fine; Paúl Epstein; Karl Kelsey; Preston Reynolds; Bailus Walker; llegaron a la conclusión que los gases lacrimógenos son armas toxicas químicas letales; es decir que producen la muerte
La letalidad se produce por espasmo de la musculatura lisa bronquial(broncoespasmo), inflamación y obstrucción de las vías respiratorias, lo cual ocasiona asfixia mortal.
Nuestra experiencia en el terreno de los hechos hemos observado abortos , quemaduras en niños y niñas, crisis de asma. Descontrol nervioso, fracturas de cráneo al perder el control de los movimientos, perdida de conciencia y coma cerebral.
Retrospectivamente podemos decir que algunas personas murieron a consecuencia de la exposición a gases durante el golpe de Estado militar.
Con la evidencia científica de investigadores del país mas rico y armado del mundo sobre la letalidad de los gases lacrimógenos concluimos que los gases han producido la muerte de hondureños y hondureñas
La verdad mas sencilla es que los que ordenan y obligan a los soldados o policías a utilizar las bombas lacrimógenas son criminales.
El crimen de la maestra Ilse Ivana Velásquez y varias mujeres y hombres del Frente Nacional de la Resistencia Popular deben obligar legal y moralmente al Estado a no utilizar gases lacrimógenos contra las protestas populares.
En memoria de Ilse Ivana Velásquez heroína y mártir de Honduras debemos defender la vida y los derechos del magisterio nacional.
Los derechos humanos no son por decreto: son inalienables , imprescriptibles y son los pueblos organizados , movilizados, resistentes los que transforman la educación y logran la libertad y autodeterminación
“El pueblo unido es mas grande que un ejercito y hará prevalecer la justicia”
“La verdad nos ara libres”
http://www.globotvhonduras.com/ Na última hora: 24 de Março de 2011 às 14h55. Sem qualquer provocação, as forças repressivas bombardeiam com a produção de lágrima de gases a instituição COPEMH dos professores
Na última hora: 24 de Março de 2011 às 14h55. Sem qualquer provocação, as forças repressivas bombardeiam com a produção de lágrima de gases a instituição COPEMH dos professores
En el mismo momento en que estaba ocurriendo el hecho de la muerte de la Maestra Ilse Velásquez como consecuencia de la represión el vocero de la policía inventaba nuevas mentiras. La profesora primero fue acestada con una bomba lacrimogena y luego cuando estaba en la calle le pasa un carro de los que iban en la desbandada generada por la policia hondureña. Este es un crimen mas que viene a sumar a mas sectores del pueblo hondureño.
Ninguna bomba le cayo en la cabeza eso es mentira, pero igual la pobre señora murió por la estampida de la muchedumbre que huía de los gases lacrimogenos.