¡Desprivatizar!
El “verbo” que en la era neoliberal no conjugan los de arriba, ni los que quieren estar bien con los de arriba.
Un “verbo” prohibido por privatizadores, imperialismos y elites capitalistas neoliberales; al que temen mencionar políticos, sindicalistas tradicionales y no tan tradicionales.
Al que le sacan el cuerpo ONGs y fundaciones financiadas por agencias internacionales sistémicas, bancas y corporaciones privadas.
Un “verbo” evadido por todos los candidatos ya proclamados, incluidos los de Alianza País, Frente Amplio, Dominicanos por el Cambio y Alianza por la Democracia…; los cuales paradójicamente se asumen “alternativos” (entre ellos quien todavía defiende a Balaguer y quien permaneció once años en el gabinete de Leonel-PLD).
Ellos no conjugan el verbo desprivatizar, pero hablan de cambiar el “modelo” y “luchar contra la pobreza” en el mercado electoral.
Olvidan que la privatización aquí, allá y acullá ha sido un pilar fundamental del funesto y empobrecedor modelo neoliberal, y que sin revertirla junto a las “des-regulaciones” que impone la dictadura de lo privado sobre lo social, no habrá cambio de modelo; por mas que intenten maquillarlo y dulcificarlo en tiempo de crisis y descrédito.
Obvian su poder empobrecedor y sus desastrosos efectos en el sistema eléctrico, industria azucarera, aeropuertos, playas, autopistas, CORDE, hoteles del Estado, concesiones mineras, facilidades a corporaciones extranjeras y apropiación dolosa de los mejores terrenos urbanos, rurales y costeros a precio de vaca muerta. ¡Amén de las abundantes estafas conexas.
Ahora los de arriba quieren hacer lo mismo con todos los puertos del país, mientras callan los que se resisten a conjugar el “verbo” desprivatizar.
Pero este es un país muy singular:
-Donde hay “verbos prohibidos” para ser funcional al sistema…
-Donde al modelo hegemónico no se le quiere mencionar el apellido (neoliberal)…
-Donde se promete cambiar el “modelo” sin desmontar sus pilares…
-Donde a la derecha no le gusta que la llamen tal…
-Donde cierta izquierda prefiere ser ex y llamarse “centro progresista”…
-Donde a esa derecha le da vergüenza defender su neoliberalismo y a ese “progresismo” enfrentar la privatización neoliberal y sus consecuencias…
-Y donde una gran parte del pueblo tiene sentimientos de izquierda y simpatías por los líderes mundiales revolucionarios; y aun harta de toda esta porquería en el poder, todavía no cuenta con la manera de barrerla y echarla al zafacón.
¡Qué paradoja y qué desafío!