Por Ricardo Salgado.
Hace unas dos semanas el escritor Emir Sader escribió un excelente artículo llamado “Tesis Equivocadas”, en el que señalaba algunas de las “flaquezas” que a veces presentamos en nuestros análisis y valoración de los acontecimientos. El señor Sader apuntaba, por ejemplo, el error que existe en pensar que un triunfo de José Serra en el Brasil, es lo mismo que un triunfo de Dilma Roussef (este es un tema de vital importancia para todo el continente del que no mucha gente está hablando en estos días). Proseguía el escritor señalando que estas apreciaciones pueden ser catastróficas para los pueblos de América Latina (interpretación mía).
Pues bien, esta tendencia a analizar con ligereza los eventos, o a restarles importancia cuando no encontramos el camino para responder adecuadamente es un serio problema que tenemos que enfrentar en nuestra propia lucha. Además, abrimos una puerta para que el enemigo haga imperar su “verdad” entre amplios sectores de nuestra población, que es víctima constante del despliegue de mentiras de los apologistas del crimen que hoy dirigen por la fuerza el Estado de Honduras.
El régimen se ha orientado a seguir la idea Goebbliana de que “una mentira dicha mil veces se convierte en verdad”. Irónicamente los principales usuarios de la práctica de difundir mentiras y ofrecer pijamas, estarían muertos de haber prevalecido Goebbles. Uno de los centros de propaganda falsa es la cancillería espuria de la república, que ha perdido todo sentido de la vergüenza, y sin tapujos miente una y otra vez, mientras los hechos no dejan un instante de desmentirlos.
Ahora debemos ocuparnos de algunas cosas que, muy posiblemente, no estamos valorando correctamente, lo que deja espacios claros a las mentiras de este “Reich de juguete” que han implantado en Honduras. Veamos unos ejemplos:
“El Informe de la Comisión de la OEA es ambiguo y no vale la pena darle más análisis”.– Falso. Esta visión constituye un gran error que la dictadura está aprovechando hasta donde le sea posible. El informe hace un enfoque “suavizado” de la situación en Honduras. La dichosa “ambigüedad útil” no es tal. Para el caso, cuando habla de “finalizar los juicios de Manuel Zelaya Rosales (por ser de carácter político) bajo las leyes hondureñas”, el informe establece con claridad meridiana que todas las instancias han actuado de manera ilegal, y, voy más allá, da pie a exigir la dimisión o remoción de todos los actores involucrados en la fabricación de estos cargos. Debemos proceder a exigir de manera sistemática y organizada la exigencia por el desmantelamiento del golpe de Estado, utilizando el argumento del Informe de esta comisión.
Más aun, la constitución violada el 28 de junio, dicta en su artículo tres, si se considera correcta la posición del informe, como lo ha hecho el régimen usurpador, la declaración de nulidad de los cargos por su propio origen y condición. No soy abogado, pero tenemos muchos compañeros que seguramente podrán construir casos alrededor de este asunto. Cuando dejamos el informe a la manipulación de los golpistas, nos exponemos a que los perseguidos políticos, estén indefinidamente en indefensión. Es pues, imperativo reformular el análisis y demostrar, que el mismo, por un acto de cortesía “zoológica” le otorga a Porfirio Lobo Sosa la virtud de tener buenas intenciones. Más allá de eso, dice con mucha vehemencia que en Honduras las condiciones generadas por el Golpe de Estado prevalecen. Nuestra obligación es difundir nuestro propio análisis; desmentir a las loras de la dictadura. No dejar que nos impongan Comisiones de la Verdad que cuentan en su membresía con gente con vocación tiránica, a la que no le tiembla la mano para reprimir, castigar con violencia a gente inocente que lucha por sus derechos.
La recolección de Actas Ciudadanas no importa.- Gravísimo error. La iniciativa de llevar adelante este proceso se fundamenta en la necesidad de que el pueblo tenga participación activa en las decisiones más importantes del país. Es incongruente presumir que las cosas se darán por arte de magia; y que el pueblo simplemente reaccionara una vez más para ser conducido a una nueva frustración.
En esta actividad se pueden contar con los dedos de la mano las personas que han estado comprometidas con firmeza en la recolección, y han buscado y siguen buscando mecanismos para poder cumplir la meta. Parece ridículo pero existen “lideres” que retienen las actas con el pretexto de que se las van a dar al presidente Zelaya cuando regrese. ¿No es esto absurdo, incluso a nivel de idea? Si precisamente una de las cosas que se reivindica en el documento es el retorno del Presidente al país. Les pregunto a estos “lideres” ¿Cuándo van a entregar las Declaraciones para que pueda retornar el compañero presidente?
Es imperativo e impostergable que todos, todas, intelectuales, escritores, políticos, amas de casa, resistentes telefónicos, periodistas afines, movimientos de toda clase, nos lancemos a la búsqueda de estas firmas. Y no debe ser una acción espontánea y aleatoria, el Frente Nacional de Resistencia Popular tiene ya montado un mecanismo que funciona, pero necesita manos, necesita voluntades, necesita compromisos.
Ver con ligereza esta actividad conlleva darle un espacio vital a la dictadura, y conducirnos a una derrota política de mayor envergadura. Noten que hago esta autocritica a nivel público, aun sabiendo que las Redes están plagadas de agentes y policías, pero después de muchos llamados que se han hecho, se hace necesario construir sobre la autocrítica, para derrotar a los que desean que fracasemos.
El Frente nacional de Resistencia Popular y la Resistencia son cosas diferentes.- Esto además de una apreciación muy superficial, refleja voluntades personales que se reúsan a trabajar al interior del frente, lo que facilita la manipulación de los infiltrados.
La idea de que existen la resistencia y el frente por separado surge mucho después del golpe de estado; es un argumento utilizado comúnmente para justificar la incapacidad de encontrar las vías necesarias para dialogar en torno a la unidad del frente nacional de resistencia, que es la expresión política de la resistencia nacional. No es muy acertado pensar que una existe sin la otra; si el FNRP desaparece, igual sucederá con la resistencia. Desafortunadamente, existen intereses hegemónicos que siguen apostando porque esto suceda.
Para muchos es más cómodo permanecer inmóviles que avanzar, esto no tiene nada que ver con los anhelos del pueblo hondureño. Para otros, la resistencia es simplemente una especie de “catapulta” que les servirá de argumento para regresar como “súper héroes” al rescate de sus podridos partidos políticos. Muchos todavía creen que es muy buena la aseveración de Elvin Santos de que el “Partido Liberal es el más grande y longevo partido de Centroamérica”; no se dan cuenta que ese es precisamente uno de los obstáculos que ha puesto el imperio para que nuestra sociedad no avance hacia una sociedad más progresista. Hoy la disyuntiva sigue presente en muchas mentes, pero en el pueblo el problema, la cuestión fundamental ya no es el bipartidismo, es “rescatamos a Honduras” o “rescatamos al partido liberal”.
No hay duda que para muchos dirigentes el asunto radica en que su modus vivendi está en juego, pero este no es un asunto conectado con los anhelos del pueblo, y en consecuencia estos compañeros deberán en un momento muy cercano decidir si toman el camino libertario del pueblo o regresan al regazo del oportunismo.
No debemos olvidar a mucha gente que se abstiene porque piensa que no se le escucha, que no se le brinda espacio. Esta es parte de la dialéctica del movimiento en marcha, pero es muy malo que la lucha por su reivindación se traduzca en su auto marginación. En todo esto debe prevalecer el interés último de vencer la dictadura y lo que ella representa; debe abordarse el debate intenso y constructivo, deben organizarse las masas “independientes” dentro del FNRP, y luchar por los fines comunes, de otro modo no hay futuro para nadie.
Los Intelectuales son acomodados y no hacen falta para la lucha.- El activismo puro puede ser un desencadénate de coyunturas especiales que impulsen la lucha hacia niveles superiores, pero no es aquí donde encontraremos el camino a seguir para alcanzar la victoria.
Ahora mismo puedo preguntar a muchas personas cual es el propósito, el objetivo del FNRP, y las respuestas serán: resistir, luchar, la constituyente e incluso refundación, pero nadie podrá desarrollar tesis sobre el objetivo concreto de la lucha que llevamos adelante. Claro, los intelectuales tampoco pueden contestar a esta pregunta. Debemos admitir que existe una inmensa diferencia entre la crítica permanente y la construcción de teoría revolucionaria, y que el momento en el que estamos ya no solo requiere de una actitud contestaría sino también se ocupa la construcción conceptual del “paso siguiente”.
Por otro lado, es de poca valía la intelectualidad sin activismo, sin militancia. No se pueden construir conceptos sin una praxis permanente, esto lo deben saber muchos, pero pocos lo hacen efectivo. Es ahora el momento cuando se tiene que dirigir la mirada al futuro y comenzar a estructurar, sin moldes, la conceptualización de una Honduras nueva, y sobre todo, debe dejarse atrás el divorcio entre la teoría y la praxis. Hoy todos debemos ser obreros y aportar en todas las áreas de la lucha.
Lamentablemente debo decir que la RED donde nos comunicamos muchos, ha perdido su carácter político, apenas conserva una posición de denuncia; pero pocos se integran a la labor constante de hacer la parte que les corresponde en el trabajo. En este punto ni acuden a las labores del Frente ni hacen mucho en la red de comunicación. Hay que re politizar esta red, identificarnos con nuestro pueblo, integrarnos a las campañas del frente, de otro modo esto no será mucho más que Facebook o Twitter, incluso puede ser menos.
En lo que voy pensando, me van surgiendo más y más ideas sobre tantas cosas que vemos de una manera errada. Pienso que me resulta difícil, aun con la riqueza nuestro idioma, titular este escrito con otras palabras distintas a las que utilizó el señor Emir Sader; todos estos conceptos nos arrastran por una senda terrible de menosprecio por el análisis profundo de los temas y nos condena a permanecer cometiendo errores tras errores.
No podemos ver con desdén los acontecimientos; lo que pasa en Panamá tiene una relación directa con lo que nos pasa a nosotros; el pueblo tico seguramente tendrá una ardua lucha para expulsar las tropas invasoras que su gobierno lacayo tuvo a bien invitar. La agresión de las derechas fascistoides seguirá en todos los países de la región, por más tibios o traidores que sean sus gobiernos. La hora de unir a los pueblos llega, no porque hagan faltas consignas, sino porque los embates vienen de un enemigo organizado, unificado, bien estructurado y con una misión clara; no podemos seguir respondiendo a esto con los mismos argumentos que ya nos produjeron tantos reveses.
No debemos ver con arrogancia la manera en que las oligarquías roban los derechos de los trabajadores y condenan a la miseria eterna a las grandes mayorías; lo que le pasa al magisterio, a los obreros, a los campesinos, a los empleados judiciales, y a muchos otros nos incumbe a todos, de una manera o de otra, el ataque contra ellos tiene un efecto demoledor en todos los demás, en el país, y regionalmente.
Vamos a dar la batalla, juntos, pensando, actuando, todo dentro de Frente, nada fuera del frente!!!
Hasta la victoria siempre
5/agosto/2010