Notícia direcionado por Angela Milla.
Adolfo Pérez Esquivel, Premio Nobel de la Paz; y Nora Cortiñas, Madre de la Plaza de Mayo de la línea fundadora, en una carta entregada hoy en la inauguración esta mañana del observatorio permanente de Derechos Humanos en la ciudad de Tocoa, en el departamento de Colón: “Nos dirigimos a los Presidentes y Presidentas de los países latinoamericanos y caribeños entre ellos a quienes han aprobado el reingreso de Honduras a la OEA en Junio pasado, para pedirles que sus gobiernos se hagan presentes en el Bajo Aguán, nombrando un representante de sus embajadas, para que se apersonen a la región, y hagan los esfuerzos que se requieren para detener la sistemática agresión y asesinatos contra los campesinos y campesinas. Pedirles además que suspendan toda ayuda financiera al gobierno hondureño, especialmente aquella destinada a las Secretarías de Defensa y Seguridad Pública, que se suspenda toda cooperación internacional dirigida a fortalecer al ejército, a la policía y a sostener la intervención extranjera sea esta en calidad de préstamo o de donación.
Nos dirigimos a la Organización de Estados Americanos (OEA) para pedir que proceda con urgencia a nombrar una comisión de verificación sobre la situación del Bajo Aguán, en apoyo a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Nos dirigimos a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para solicitar que envíe relatores especiales al país, para constatar las denuncias de las poblaciones afectadas en el lugar de los hechos.
Nos dirigimos a las instituciones financieras internacionales, a los inversores, a los llamados donantes, para que suspendan toda operación que afecte la zona, hasta tanto su necesidad y legitimidad sean comprobadas, desde la perspectiva de los derechos de las comunidades afectadas. A las autoridades hondureñas, les exigimos que respeten los compromisos asumidos frente a la comunidad internacional, velar por los derechos humanos, dar protección a las personas y comunidades en riesgo, investigar y sancionar los crímenes, castigar a los responsables, terminar con la criminalización de los movimientos campesinos, avanzar hacia la solución de la grave problemática agraria que afecta al campesinado hondureño, garantizar el derecho a la tierra, impedir el avance de la agroindustria por sobre la soberanía alimentaria, desmilitarizar la región, suspender los operativos militares como XATRUCH, y ponerle fin a la presencia militar extranjera.
Nos dirigimos a los pueblos del continente, para que se mantengan en alerta frente a la situación de grave peligro que se presenta en Honduras, y especialmente en la zona del Bajo Aguán. Es urgente detener la masacre en el Bajo Aguán. Adolfo Pérez Esquivel Premio Nobel de la Paz. Nora Cortiñas, Madre de la Plaza de Mayo.
(Leída en la inauguración del observatorio permanente de Derechos Humanos en Tocoa, Colón. Leída por el Lic. Félix Molina en Radio Globo.)
Na foto: Adolfo Pérez Esquivel.